UN GLOBO QUE EMPIEZA A VOLAR ALTO

 

Huracán sigue manteniendo el liderazgo, seguido por Unión y Atlético Tucumán, tras igualar ante River en el regreso de Marcelo Gallardo. Boca salvó la ropa sobre el cierre. Independiente volvió al triunfo. Racing está sumido en su irregularidad. San Lorenzo no sale de su abismo.

Huracán mantuvo la punta del campeonato tras empatar en un tanto frente a River en el estadio Monumental en lo que marcó el regreso de Marcelo Gallardo a la dirección técnica del equipo de Núñez. El conjunto de Parque Patricios soportó el aluvión inicial con hidalguía y en el segundo tiempo hasta lo pudo haber ganado. 

Boca no levanta cabeza y se salvó de una derrota (que mereció, por otra parte) en Mendoza ante Independiente Rivadavia. El conjunto cuyano, con limitaciones a cuestas, fue superior al de la Ribera, que consiguió una agónica igualdad en tiempo de descuento. Fue un 1 a 1 y un rendimiento preocupante para uno de los animadores habituales del fútbol argentino.

Racing no puede salir de un rendimiento que ya está dejando de ser irregular para comenzar a ser malo. La Academia cayó en Avellaneda ante Gimnasia por 1 a 0 y generó murmullos y algún insulto para el plantel y el cuerpo técnico comandado por Gustavo Costas. El entrenador está comenzando a ser observado por lupa y su paraguas protector por ser un hombre de la casa se está viendo peligrar. 

Independiente mostró signos de recuperación al derrotar en La Plata a Estudiantes por 2 a 0. Este triunfo podría marcar una nueva etapa y darle un envión anímico para levantar la cabeza y salir de esa posición en la que se encuentra.

No sucede lo mismo con San Lorenzo, sumido en una crisis futbolística de la que no puede salir. Los de Boedo cayeron en el Nuevo Gasómetro ante Atlético Tucumán por 1 a 0 provocando el cansancio de la gente hacia la dirigencia, siendo su presidente Marcelo Moretti el blanco preferido para los insultos de la parcialidad sanlorencista.

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