JUGADORES QUE SE PUSIERON CAMISETAS OPUESTAS: ALFREDO MENDOZA

 

    Si se repasan nombres que dejaron huellas en el fútbol argentino y, especialmente en Rosario, el nombre de Alfredo Damián Mendoza estará presente. El delantero paraguayo, nacido en Encarnación el 31 de diciembre de 1963, tuvo un recordado paso por Newell´s Old Boys, donde en los tres años que estuvo allí fue campeón del torneo Clausura 1992 y estuvo a punto de coronarse en la Copa Libertadores pero cayó en la final ante Sao Paulo por penales (él malogró el suyo). En ese certamen, tuvo una actuación destacada, sobre todo en la primera semifinal ante América de Cali en Rosario, cuando estando disminuido físicamente, permaneció en la cancha y marcó el gol del empate. Por actuaciones como esa, en la que el paraguayo mostró toda su garra es que se ganó a la afición "leprosa".

 

   En la carrera de Mendoza, muy fructífera y exitosa, figura la curiosidad de haber debutado en primera división jugando para Cerro Porteño y retirándose... en Olimpia. El delantero guaraní, según sus palabras en algún que otro reportaje, cumplió el sueño de su padre al ponerse los colores del "Ciclón del Barrio Obrero" durante los dos primeros años de su carrera. Allí, en 1986, fue transferido a Independiente Medellín por una temporada, para luego jugar otra en Deportivo Cali, en plena época dorada de la liga colombiana. En 1988 regresó a su tierra para cruzarse de vereda y jugar en Olimpia. Lo hizo por un año antes de tener su experiencia en Europa, más específicamente en Brest, Francia.    

    En 1991 regresó a Sudamérica y recaló en Corrientes para defender los colores de Mandiyú. Su muy buen paso por la provincia mesopotámica, hizo que Marcelo Bielsa, entrenador de Newell´s posara sus ojos en él y se lo llevara a Rosario. Mendoza tuvo un breve paso por Atlas, en México para luego regresar a su país y finalizar su carrera en Olimpia. 

    A su vez, tuvo un paso largo por la selección de Paraguay, con la que disputó dos ediciones de la Copa América, en 1983 y 1989, y el Mundial de México en 1986, al que los guaraníes clasificaron en el repechaje y luego fueron eliminados en octavos de final por Inglaterra. Disputó 43 partidos con la "albirroja" y marcó 9 tantos.

El Puma