ESTÁ PARA CUALQUIERA

 

Tras las sorpresas de los cuartos de final, el torneo Apertura de la Copa de la Liga se volvió aún más una incógnita. Independiente y San Lorenzo son los grandes que quedan. Platense, que se cargó a dos candidatos, aparece fuerte. Huracán es una caja de Pandora y dar un dolor de cabeza a su rival si llega a jugar bien.

Tras los cuartos de final en donde clasificaron todos los equipos visitantes, las semifinales aparecen apasionantes, puesto que la incógnita reina en el ambiente más que nunca. Cualquiera de los cuatro equipos que llegaron a esta instancia, pueden coronarse el próximo 1 de junio en el estadio Madre de Ciudades de Santiago del Estero.

El primer choque será entre Independiente y Huracán, un duelo muy interesante y que, en la previa, tiene como favorito al equipo de Avellaneda. Por historia, por mejor ubicación en el torneo, por los duelos decisivos en los que se impuso el Rojo, la predicción parece obvia. Pero no todo es tan obvio en el fútbol, sino directamente entregarían el trofeo a los mismos de siempre por sorteo. Huracán viene de ganarle a Rosario Central, el mejor equipo de la fase de grupos en Rosario con mucha autoridad y, a su vez, pasó a cuartos de final venciendo en Parque de los Patricios a Riestra con mucho sufrimiento.

Independiente viene teniendo un tránsito de menor a mayor y su gente está ávida de dar una vuelta olímpica a nivel local, hecho que no sucede desde 2002. Es, quizás, el mejor de los equipos que quedan, pero debe superar a un rival muy duro, de esos a los que nadie quiere enfrentar. Sin embargo, su andar ante Boca en la Bombonera, lo convierte en serio candidato. Huracán es una incógnita. Si juega bien, puede voltear a cualquier equipo que se se le pare enfrente.

San Lorenzo llega a puro corazón y con una carga emocional muy grande. Tiene a su presidente acusado de hechos de corrupción, a dirigentes cuestionados y con un plantel que estuvo de huelga por no haber cobrado sus haberes. Sin embargo, los futbolistas y el cuerpo técnico mostrando una rebeldía pocas veces vista, además de contar con el aliento de sus hinchas (que a la hora de insultar lo hace con la dirigencia y no con el plantel) que es incondicional. Platense, con limitaciones, pero muy bien organizado tácticamente, viene de eliminar a dos de los favoritos al título como visitante. Primero se cargó a Racing en Avellaneda y luego a River en el estadio Monumental. ¿No habrá dos sin tres? No es en absoluto descabellado pensar en que Platense pueda dar el tercer batacazo consecutivo. Se espera un partido más luchado que jugado, con un equipo grande jugando con su gente y con la necesidad de ser protagonista. Del otro lado, el Calamar no tiene nada que perder y puede darse el lujo de jugar con la ansiedad y los nervios de su rival. El correr de los minutos puede ser su mejor aliado.

Posiblemente los cuatro semifinalistas no eran los esperados al finalizar la fase de grupos. Esto es una muestra más de que los partidos hay que jugarlos y tomárselos en serio. Realmente, es muy difícil hacer un pronóstico, solo puede afirmarse que este torneo Apertura de la Copa de la Liga está para cualquiera.

El Puma