SELECCIÓN ARGENTINA: ENTRE EL FUTURO DEL ENTRENADOR. EL RECAMBIO Y LOS AMISTOSOS


 

Imagen: Perfil

    Los fuegos artificiales ya se tiraron, los festejos - merecidos, por cierto - pasaron. Ahora hay que empezar a trabajar de nuevo para mantenerse en los laureles conseguidos. Para eso, hacen falta varias cosas: tener una base y preparar un recambio teniendo en cuenta que la meta final se debe alcanzar en 2026; saber cuál será el cuerpo técnico que comandará el proyecto y medirse ante rivales fuertes en los partidos amistosos. 

    En el primer punto, hay base, aunque se debe pensar en el recambio ya que hay jugadores que no llegarán a estar dentro de dos años, algunos porque los almanaques pasan para todos y otros porque ya establecieron su fecha de vencimiento, como fue el caso de Ángel Di María, quien se despedirá del equipo albiceleste una vez finalizada la participación en la Copa América. Existen muy buenos proyectos en juveniles que podrían llegar con cierta madurez a la cita norteamericana del próximo Mundial. Alejandro Garnacho, Luka Romero, Ezequiel Carboni, Valentín Barco son nombres de recambio más prontos a llegar. Entre los que pueden llegar a bajarse del tren antes de 2026 figuran Franco Armani, Marcos Acuña, Germán Pezzella, Guido Rodríguez, Nicolás Tagliafico, Nicolás Otamendi y mismo Lionel Messi. Para ello, habrá que ver si el mismo cuerpo técnico que armó este equipo campeón en Qatar o si este cambiará también. 

    Esta última posibilidad era impensada hasta hace unos meses, cuando Argentina venció a Brasil en Rio de Janeiro por las eliminatorias sudamericanas. Allí, Lionel Scaloni, en conferencia de prensa, afirmó que debía meditar si continuará o no al frente del seleccionado. ¿Qué podría motivarlo a seguir? Querer seguir ganando títulos y enfrentar nuevos desafíos. ¿Qué es lo que lo llevaría a no seguir? El hecho de haber obtenido la Copa América y el Mundial, puesto que no le quedarían nuevos objetivos, a pesar de que se lo mencionó para dirigir en los Juegos Olímpicos. Scaloni no tiene más nada que demostrarle a nadie y, en caso de salir en el corto plazo, lo haría por la puerta grande. Quizás no quiera sufrir un desgaste lógico después de seis años en el cargo. O tal vez no se anime a hacer el recambio en el plantel que él mismo armó. Sea como sea, todo esto no son más que conjeturas e hipótesis.

    Finalmente, hay que saber dónde se está parado. Desde que Argentina se consagró en la definición por penales ante Francia, el 18 de diciembre de 2022, en Doha, los únicos partidos en los que se pudo ver la medida de los rivales fueron en las eliminatorias. Y allí fue donde perdió su único partido. En los amistosos, enfrentó a combinados de menor nivel. Eso estuvo bien para festejar la obtención del título y poder lucirse ante su público, sin embargo, luego de un año y medio, ya es hora de empezar a medirse con rivales de fuste. Durante mucho tiempo, la excusa fue que los europeos no tienen fechas y que es complicado combinar con ellos. Habría que preguntarle a Chile como hizo para jugar contra Francia, como hicieron Colombia y Brasil para enfrentar a España, como es que Inglaterra también recibió a Brasil o como Ecuador y Venezuela consiguieron jugar ante Italia. Claramente no es imposible enfrentar a los mejores. ¿Por qué Argentina, último campeón, no lo hace?

    De los tres puntos mencionados, a Argentina no le falta nada, aparentemente. Los jugadores para el recambio parecen interesantes, resta saber si colmarán las expectativas. El cuerpo técnico actual ya demostró estar capacitado tras muchos años de críticas permanentes. Para saber si las dos primeras cosas están efectivamente bien, restaría el último punto y poder jugar amistosos contra selecciones de mejor nivel. 

El Puma

Comentarios

Publicar un comentario

Entradas populares de este blog

LAS BONDADES DE TUCUMÁN

¡AVE CÉSAR!

DOS QUE QUIEREN VOLVER A SER