¡BASTA DE FALTARLE EL RESPETO!

 Imagen: One Football

    Vaya a saber uno por qué, un gran sector del periodismo está ensañado con Franco Armani, y no ahora, desde hace bastante tiempo. Cuando River lo compró, a inicios de 2018 y con el antecedente de haber sido dos veces finalista de la Copa Sudamericana y una vez campeón de la Copa Libertadores, la mayoría de los hinchas y periodistas poco sabían de él. Comenzó a justificar su llegada con grandes actuaciones en los superclásicos y luego en partidos claves. Ese gran rendimiento, lo llevó a la selección argentina. Tras dos partidos en el banco de los suplentes, debutó en el Mundial de Rusia 2018, ante Nigeria con una actuación correcta. Luego, poco pudo hacer ante el aluvión francés en octavos de final. Desde allí, algunos - con clara mala intención - empezaron a dudar de sus condiciones. En el resto del año, con actuaciones brillantes, esos detractores decían que era ante Francia que debía tener ese rendimiento. Siempre desde la comodidad de la cabina, el micrófono y el hecho de que ellos nunca pierden ni cometen errores. 

    Ese mismo año, Armani se consagra campeón de la Copa Libertadores con River, tras vencer en la histórica final a Boca en el estadio Santiago Bernabeu, de Madrid. A partir de ese momento, siempre se buscó señalar errores en algunos goles, se lo quiso sacar de la selección con campañas asquerosas y comparándolo con otros arqueros, sosteniendo que no era "arquero para la selección". De lo que se agarraban, entre otras cosas, era que no atajaba penales. Es cierto que su eficacia en los tiros desde los doce pasos es muy baja, pero esos "campeones permanentes" omiten contar que uno de los pocos penales que Armani contuvo, sirvió para que Lionel Scaloni pudiera quedarse en su puesto de director técnico, cuando esa chance peligraba. 

    Antes del último Mundial, en el que Argentina se consagró, ese mismo sector lo quiso sacar del plantel postulando a Agustín Rossi alegando que este atajaba penales, olvidando que Emiliano Martínez cubría muy bien esa parte. Y, si bien el nivel de Armani no es el del 2018 (y posiblemente ya no alcance ese rendimiento) sigue siendo un pilar fundamental en el arco de River. Anoche, el conjunto "millonario" cayó por penales ante Internacional de Porto Alegre y el arquero no tuvo una actuación afortunada en la definición. Como los resultados tapan todo y los resultadistas solo ven el árbol sin mirar al bosque, los comentarios de que "tiene que jubilarse" aparecieron. Nadie menciona que, durante los 90 minutos, tuvo dos tapadas fundamentales para que River no se fuera goleado. Tampoco se menciona el hecho que Sebastián Rochet, arquero de Internacional y héroe por convertir el último disparo, tampoco atajó un penal. 

    Lo que hacen con Armani desde hace cuatro años es lisa y llanamente faltarle el respeto. Eso es inadmisible y solo resta pedir una sola cosa: ¡BASTA!

El Puma