JUGADORES QUE SE PUSIERON CAMISETAS OPUESTAS: ALDO SERENA
Imagen: pokerstarsnews.it
En la década de los años 80 del siglo XX, comenzó a florecer en Europa y a nivel mundial el fútbol italiano. Con la selección nacional campeona del Mundo en 1982, primero y el surgimiento de grandes equipos campeones de Europa como Juventus, primero, y Milan después. La liga itálica se iba posicionando, tanto por los talentos locales, como por las grandes contrataciones de extranjeros, como la más poderosa. Uno de los grandes delanteros italianos de ese entonces era Aldo Serena, jugador que comenzó jugando como mediocampista, y se convirtió en un goleador cuya mayor virtud era el cabezazo. El atacante nació en Montebelluna, el 25 de junio de 1960 y en el club de su pueblo comenzó a jugar. Al poco tiempo, recaló en las filas del Inter en 1978. Solo jugó en el "nerazzurro" una temporada, antes de deambular a préstamo por Como y Bari y regresar en 1981.
Luego de jugar una temporada en el club milanés, sucedió algo insólito. Volvió a salir a préstamo nada más y nada menos que... ¡a Milan! El conjunto "rossonero" acababa de ser sancionado con el descenso de categoría, por el affaire de apuestas clandestinas. Jugó un año en la serie B consiguiendo el ascenso antes de regresar nuevamente a Inter. A esa altura, Serena se había convertido en un nómade inquieto. Un año estuvo en el club dueño de su pase, antes de ser transferido a Torino. Para no perder la sana costumbre, solo permaneció allí una temporada y recalar en las filas de... ¡Juventus! Así como cruzó de vereda en Milán, también lo hizo en Turín. En la "Vecchia Signora" terminó de explotar, obteniendo títulos locales de Serie A, la Copa de Campeones de Europa - hoy U.E.F.A Champions League -, la Copa Intercontinental (obteniéndola por penales en un memorable partido frente a Argentinos Juniors) además de formar un gran tridente ofensivo con cracks de la talla de Michel Platini y Michael Laudrup.
Como bien evoca el tango "siempre se vuelve al primer amor", Serena, tras dos años como delantero "bianconero", regresó a Milán para calzarse la camiseta de Inter. Allí vivió cuatro temporadas gloriosas, obteniendo el "scudetto" en 1989, formando dupla ofensiva con Ramón Díaz y compartiendo equipo con Andreas Brehme, Lothar Matthaus, Nicola Berti, Walter Zenga, Giuseppe Bergomi, entre otros. Obtuvo también la Copa U.E.F.A en su último año. Al finalizar su contrato, Inter decidió no renovárselo. Serena, en forma de venganza, volvió a cruzarse de vereda y recaló en Milan. Sin embargo, a pesar de llegar a un club ideal, ya que ese momento de la historia del club era de los más gloriosos, Serena no encontró lugar en el once titular, ya sea por lesiones o porque el equpo tenía otras variantes. Tras dos años de estar lesionado y mirando partidos desde la platea, decidió retirarse.
Amén de haber cruzado de vereda varias veces y de triunfar en todos esos clubes, Serena también formó parte de la selección italiana. Participó en dos Mundiales, 1986 y 1990. En el primero, formó parte del plantel, pero no jugó ni un sólo minuto. En el segundo, disputado en Italia, alternó titularidad con suplencia, marcó un tanto frente a Uruguay en los octavos de final y fue quien falló el último penal en la definición por tiros desde los 12 pasos ante Argentina, el memorable remate atajado por Sergio Goycochea.
En la actualidad, Serena no está identificado con ninguno de los equipos en los que jugó y pasa su tiempo comentando partidos para el multimedio Mediaset.
El Puma
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