MISMA FINAL, MISMO ESCENARIO, ¿MISMO RESULTADO?

Boca Juniors y Tigre definirán el título de la Copa de la Liga en el estadio Mario Alberto Kempes de la ciudad de Córdoba. Esta noticia pasaría totalmente desapercibida si no fuera porque es repetida, en la previa. Tres años después el hecho se repite. Aquella vez, la Copa de la Liga estaba en su edición de bautismo y la realidad de ambos era totalmente diferente. En honor a la verdad, la de Tigre era distinta. El conjunto de Victoria acababa de descender, pero jugó ese torneo en gran nivel y lo ganó en forma mucho más que merecida. Boca también era protagonista de los campeonatos en los que participaba y era el candidato natural a obtener el título... como ahora. En aquel entonces, dirigido por Néstor Gorosito, Tigre ganó 2 a 0 con goles de Federico González y Lucas Janson de penal. De aquel once titular, solo quedaron Gonzalo Marinelli, Lucas Menossi y Sebastián Prediger. Ese fue el último encuentro del "Matador" en Primera División y por el nivel demostrado en aquel certamen, más la gran remontada en las jornadas finales de la Superliga, presagiaban un rápido retorno a la máxima categoría. Sin embargo, eso no fue así. Le llevó dos años regresar y le costó muchísimo más de lo esperado.

El conjunto de la Ribera tenía a Gustavo Alfaro al mando del primer equipo cuando se jugó ese partido. El "xeneize" contaba con un gran plantel, golpeado injustamente por la crítica periodística y los resultadistas. Todos ellos aprovecharon la caída en aquella final para caerle aún más fuerte tanto al cuerpo técnico, al que consideraban demasiado defensivo y que no estaba a la altura. Pero el fútbol da revancha y, después de tres años, Boca tiene la posibilidad de "vengarse" de su verdugo de antaño. Ninguno de los dos tienen el plantel o el nivel futbolístico de aquel entonces, pero los auriazules cuentan con mayor jerarquía individual y cuenta con muchos más recursos (algo que casi no hace falta aclarar).

¿Qué tiene Boca para llevarse el título? Una defensa con una zaga central muy fuerte, ya sea que estén Carlos Izquierdoz, Marcos Rojo, Nicolás Figal o Gastón Ávila y dos laterales que son mejores atacando que defendiendo. Tanto Luis Advíncula, como Frank Fabra, son muy buenos proyectándose hacia adelante, pero cuyo punto flojo es el retroceso. En el medio, Sebastián Battaglia cuenta con muchas variantes. Puede optar con un volante central como Alan Varela o Jorman Campuzano. En el caso del primero, contará tanto con marca como con pase limpio hacia adelante y hacia los costados. Si opta por el colombiano, tendrá más marca y lucha que juego asociado. Juan Ramírez o Cristian Medina, acompañando a Guillermo "Pol" Fernández en las puntas y Oscar Romero pueden conformar el medio campo. Ramírez no viene teniendo rendimientos esperados por la parcialidad boquense, pero cuenta con mayor experiencia que Medina, cuyo nivel viene siendo más que aceptable. Pol Fernández es el motor del equipo, aportando dinámica y empuje. Será fundamental una buena actuación del volante. Adelante cuenta con la velocidad y explosión de Sebastián Villa y el aporte goleador de Darío Benedetto. En caso de que este último no tenga una buena tarde, cuenta con Luis Vázquez para reemplazarlo. Otra variante en la ofensiva es el aporte de Eduardo Salvio, ya sea arrancando unos metros más atrás o desde el frente de ataque como delantero por las puntas. En caso de ir a la definición por penales, el arquero Sebastián Rossi ha demostrado ser un experto en esa instancia. Claro está, tiene el mejor panorama.

¿Con qué cuenta Tigre para repetir aquella tarde? Marinelli, vigente guardameta, le da confianza a sus simpatizantes. En la defensa cuenta con el aporte ofensivo de Lucas Blondel por la derecha. El lateral que viene de Atlético Rafaela ha ido de menor a mayor en la última temporada y no sería de extrañarse que vaya a algún equipo de los denominados grandes de la Argentina o al exterior. Sebastián Prieto quien va por la izquierda y tiene alma de delantero. La zaga central la componen Víctor Cabrera y Brian Luciatti. En el medio cuenta con el inoxidable Prediger, firme en la marca y luchador incansable, Alexis Castro y Facundo Collidio van como carrileros, siendo este último poseedor de una gran velocidad. Ezequiel Fernández, revelación del torneo, cumple la función de doble 5 y colabora en la creación y asociación del equipo en ataque. Cristian Zabala completa la mitad de la cancha, mientras que adelante está Mateo Retegui, un delantero central potente y muy difícil de marcar. ¿Cuál será la clave para los de Victoria? Tratar de golpear primero y rápido como para desconcertar a su adversario.

Todo está listo, el diario del viernes se escribió. Faltan 90 minutos para redactar la edición del lunes con los hechos consumados. Muchas partes ya se escribieron antes: mismo torneo, misma final y hasta mismo escenario. Los de Tigre esperarán ediciones similares a las de 2019, mientras que los de Boca sueñan con titulares informando otra estrella más. La verdad estará en el verde césped.

El Puma