LA ERA DE LOS TORNEOS CORTOS: RIVER INVICTO 1994

     El Mundial de Estados Unidos 1994 había comenzado con ilusión y terminó en desencanto. La eliminación argentina caló hondo en la opinión pública y se culpaba a cierta "indisciplina" en el cuerpo técnico comandado por Alfio Basile. Mientras tanto, se elogiaba el orden y la disciplina que había en River Plate, por lo que se postuló a quien era su entrenador, Daniel Passarella, para suceder al "Coco". Julio Grondona, por entonces mandamás de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) escuchó ese pedido transmitido por un gran sector del periodismo y confió en el "Kaiser" para dirigir a la selección argentina. Passarella se fue de River y dejó por seis meses a su primer ayudante de campo, Américo Rubén Gallego, para dirija al equipo mientras los dirigentes "millonarios" le buscaran un sucesor. 

    ¿Cómo sería la mecánica con el "Tolo"? ¿Podría hacerse cargo como mandamás del equipo? Esas preguntas tuvieron rápidamente su respuesta. El equipo se reforzó con Germán Burgos, arquero que provenía de Ferrocarril Oeste y con su megaestrella que regresaba de Europa: Enzo Francescoli. El uruguayo había estado 8 años en el Viejo Continente y también era una incógnita al llegar. Pero rápidamente hizo recordar a su primera época en el club y los hinchas se ilusionaban con eso. El rendimiento de River iba de menor a mayor y, fecha tras fecha, se consolidaba como líder del torneo sin perder partidos. Burgos se adueñó del arco, con actuaciones soberbias, pero también con varios errores. Hernán Díaz y Ricardo Altamirano eran los dos laterales, mientras que en la zaga central se consolidó Roberto Ayala junto con Enrique Ernesto Corti o Guillermo Rivarola. Néstor Gabriel Cedrés, Sergio Ángel Berti, Leonardo Astrada y Marcelo Gallardo (alternando con José Luis Villarreal o Ariel Ortega cuando jugaba más retrasado). Adelante Francescoli con Hernán Crespo o Gabriel Amato. 

    Solo le quedaba una cosa pendiente, que no se había podido conseguir durante los 4 años anteriores con Passarella: ser campeón y ganarle a Boca. En la penúltima fecha se enfrentaron en la Bombonera. Los de la Ribera, dirigidos por César Luis Menotti, estaban de capa caída pero estaban confiados en estirar su racha ante el eterno rival. Sin embargo, nada de eso sucedió. Francescoli, de penal, Ortega y Gallardo, este último también de penal, sentenciaron el partido, que fue el último de Menotti en Boca. No pudo dar la vuelta olímpica ese día ya que San Lorenzo, su más inmediato perseguidor, debía jugar un encuentro pendiente ante Newell´s Old Boys entre semana, partido que perdió y le dio a los dirigidos por Gallego, otra estrella más. La vuelta olímpica la dio en la última fecha ante Vélez Sarsfield en el Monumental. Tan bueno fue el rendimiento del equipo siendo dirigido por el "Tolo", que buscaron convencerlo para que se quedara, pero él le había dado su palabra a Passarella que lo acompañaría en la selección después de esos seis meses. 

El Puma